viernes, 26 de diciembre de 2014

FIBES I, FIBES II, ¿Universos distintos?


Si algún sevillano no conoce Fibes, tiene un gran problema. Para todos los demás, se encuentran ante el conocido como “Palacio de Exposiciones y Congresos” de la capital hispalense. Algunos se preguntarán ¿cuál de ellos? Pues bien hace un par de años acabaron las obras de ampliación comenzadas en 2008, del construido casi veinte años antes, con el que nada tiene que ver.


El Palacio de Congresos pionero, proyectado por Antonio Sáseta Velazquez y construido en 1989, se hizo como un edificio de ladrillo con una gran cúpula del que manan tres grandes naves. Es considerado como una obra de arquitectura sincera, ya que desde casi cualquier punto se puede observar el conjunto de la obra tal y como es.


Su acceso viene dado a través de una gran plaza semicircular de unos dos mil metros cuadrados, la cual se encuentra rodeada de cascadas y láminas de agua. Esta superficie se reparte en tres pabellones de 7.200 metros cuadrados cada uno, que conectan con el complejo de congresos a través de varias galerías. El recinto cuenta con varias zonas exteriores, como la plaza de entrada y los dos triángulos o áreas de exposiciones exteriores.



El nuevo Fibes o Fibes II, construido hace un par de años y diseñado por el arquitecto Guillermo Vázquez Consuegra se levanta al exterior con una gran fachada de cristal que contrasta con los muros de ladrillo visto del primer palacio de congresos. Tiene planta en forma de L, donde uno de los brazos se sitúa paralelo al tercer pabellón de los existentes, y el otro ocupa la nueva parcela. Formado por una estructura estratificada, permeable y transparente, transitada por un espacio fluido y continuo, cruzada por pasarelas, rampas y escaleras, y donde el jardín interior juega un papel activo en la organización del espacio, facilitando la orientación del usuario.


Además ha de mencionarse que gracias a su monumental auditorio que posee unas 3.500 butacas, se ha alzado como él más grande de España.


Dejando a un lado la funcionalidad de ambas construcciones, vemos que nada tienen que ver el uno con el otro. El primer palacio de congresos utiliza recursos como el ladrillo, carpinterías más clásicas en rojo, juega con el agua en una llamativa entrada y un elemento que podemos considerar principal que es una gran cúpula de 25 metros de altura. En general es un espacio mucho más clásico y con unas proporciones y una geometría más cuidada y tonos cálidos. Mientras la ampliación es un espacio que podíamos considerar casi de futurista, con un gran uso de materiales metalizados como el aluminio y un tratamiento bastante particular de la luz, que según el arquitecto es la inspiración principal del proyecto. Son lugares totalmente antagónicos y parece casi una broma que se encuentren pegados y que formen parte de lo mismo.



Galerías de Fibes I
En un momento dado puede que se formen espacios interiores con características muy diferentes y atractivas, aunque desde mi punto de vista son mas interesantes los de la ampliación de Vázquez Consuegra (pese que una parte de la ampliación la conozco mediante fotos) debido a las formas irregulares que se forman. Sin embargo mucho más fríos y que casi restan protagonismo a cualquier exposición.


Foto de uno de los auditorios y una galería de Fibes II

Exteriormente es un horror el contraste que forman, resulta casi como ver la iglesia de Santa Sofía junto al museo Guggenheim de Frank Gehry, y ya no solo visto desde el punto de un estudiante de arquitectura, sino desde una persona que pasa junto a esta zona a diario. No hay ningún nexo entre ambos siendo espacios con una misma función y en un mismo lugar, algo verdaderamente chocante. Posiblemente si no pusiera Fibes en los dos, la gente pensaría que no tienen nada que ver.

En cuanto a las plantas, para variar, son totalmente opuestas, mientras el primer Fibes se compone de formas geométricas simples, y posee un eje de simetría, la ampliación es mucho más compleja e incluso algo caótica, tanto que no se a simple vista resulta imposible reconocer una geometría. Vemos piezas compuestas por muchos elementos como trapecios, triángulos, rectángulos, etc. 




En este plano de la planta se observa la curiosa mezcla.


Una de las cosas más llamativas es que entre ambas construcciones hay a penas veinte años de diferencia, ¿se ha quedado anticuada la arquitectura del primer palacio de congresos? Porque desde luego es bastante más clásico que la ampliación. O enfocándolo desde otro punto, ¿se ha planteado en algún momento Guillermo Vázquez Consuegra lo primordial al empezar el proyecto, es decir, el emplazamiento de este? Porque indudablemente es un buen proyecto, se crean espacios interesantes donde la luz cobra un gran protagonismo y zonas de intermediación entre interior y exterior, pero ¿ese era el sitio?



Lo que resulta verdaderamente un espanto es el coste de este espacio, el cual fue aproximado a inicios de la construcción en 66 millones de euros y casi se duplicó. Pero lo que resulta aun peor es la idea de que se construyera en Sevilla donde aun a día de hoy continua una de las crisis económicas mas fuertes de las últimas décadas. Familias que viven en la calle y comen en comedores sociales, pero que pueden PRESUMIR de vivir en la ciudad que se propone ser la tercera ciudad española con mayor número de congresos.

Ante este sobrecoste, el arquitecto ha defendido su obra y ha asegurado que "toda la inversión que se ha hecho esta aquí, empleada" y que el edificio se ha construido "sin el más mínimo despilfarro económico".

Pero no es de extrañar, recordemos que pasó algo similar hace relativamente poco tiempo en el proyecto “Metropol Parasol” donde los costes se acercaron a 110 millones de euros, con un presupuesto inicial de 51, sin lugar a dudas uno de los parasoles mas caros de la historia... Atracos a mano armada donde todos pillan “cacho” menos los obreros, algo que en España ya es de lo más habitual.









No hay comentarios:

Publicar un comentario